La menopausia es una etapa natural en la vida de una mujer que se caracteriza por el cese de la menstruación y la disminución de la producción de hormonas como el estrógeno. Esta transición hormonal puede tener un impacto significativo en la apariencia y la salud de la piel, ya que se produce una reducción en la elasticidad, la hidratación y la producción de colágeno.
La doctora Carmen Martín, especialista en Medicina Estética, con clínica en Madrid, señala: “Afortunadamente, la medicina estética ofrece una amplia gama de tratamientos eficaces para abordar los cambios cutáneos asociados con la menopausia y rejuvenecer la apariencia de la piel”.
Algunos de los tratamientos más eficaces son:
» Neuromoduladores: es un tratamiento muy común para reducir las arrugas y líneas de expresión en el rostro. Se inyecta en los músculos faciales para relajarlos y suavizar las arrugas. Su aplicación es perfecta para reducir las arrugas del entrecejo, las patas de gallo y las líneas de la frente, lo que proporciona un aspecto más rejuvenecido.
Los fillers dérmicos, como el ácido hialurónico, pueden ayudar a reponer el volumen perdido, mejorar la hidratación de la piel y reducir la apariencia de las arrugas.» Fillers dérmicos: son sustancias que se inyectan debajo de la piel para restaurar el volumen y suavizar las arrugas. Durante la menopausia, se produce una pérdida de colágeno y elastina en la piel, lo que puede provocar flacidez y arrugas más pronunciadas. Los fillers dérmicos, como el ácido hialurónico, pueden ayudar a reponer el volumen perdido, mejorar la hidratación de la piel y reducir la apariencia de las arrugas.
» Terapia de luz intensa pulsada (IPL): la IPL es un tratamiento no invasivo que utiliza luz pulsada para tratar una variedad de problemas de la piel, como manchas de la edad, lesiones vasculares y enrojecimiento facial. Durante la menopausia, es común que las mujeres experimenten un aumento en la aparición de manchas y un tono de piel desigual. La IPL puede ayudar a eliminar las manchas y mejorar la textura general de la piel, promoviendo un aspecto rejuvenecido.
» Tratamientos de radiofrecuencia: los tratamientos de radiofrecuencia calientan las capas profundas de la piel utilizando ondas de radio, lo que estimula la producción de colágeno y mejora la firmeza y la textura de la piel. Este tratamiento puede ser efectivo para tratar la flacidez de la piel y reducir la apariencia de arrugas y líneas finas.
» Peeling químico: los peelings químicos utilizan una solución química para exfoliar las capas superiores de la piel y promover la regeneración celular. Esto puede mejorar la textura de la piel, reducir la apariencia de manchas oscuras y estimular la producción de colágeno.
» Dermapen: se utiliza un dispositivo con pequeñas agujas para abrir canales en la piel y estimular la producción de colágeno y elastina. Este proceso ayuda a mejorar la textura de la piel, reducir las arrugas y las cicatrices, y promover un aspecto más juvenil.