El ácido hialurónico es un componente natural de la piel capaz de retener y absorber hasta 1.000 veces su peso en agua. Una persona contiene 15 gramos de ácido hialurónico de media. De esta cantidad, un tercio se degrada y sintetiza cada día.
Con el paso del tiempo, a medida que envejecemos, esta producción natural de hialurónico disminuye. A partir de cierta edad, entre los 25 y 30 años, el ácido hialurónico natural empieza a disminuir. A los 60 sólo conservamos el 10%. Las consecuencias visibles de este proceso son la aparición de arrugas y una pérdida de firmeza y de luminosidad de la piel. De ahí la importancia de recurrir a un aporte extra para suplir su carencia y frenar el paso del tiempo.
Es posible revertir esos daños. La medicina estética ofrece soluciones eficaces como los rellenos de ácido hialurónico cuyos resultados son inmediatos, efectivos y duraderos.
Fillderma Repair, de Mediderma, es un gel de ácido hialurónico sin reticular que emplea la tecnología Tissue Trophic, que garantiza un resultado más duradero y una mejora de la armonía de los rasgos faciales. Tras cuatro sesiones, el resultado es una piel mucho más hidratada y elástica, con un aspecto más sano y revitalizado. Este tipo de relleno es biocompatible y reabsorbible, totalmente seguro y de máxima pureza. Además, Fillderma cuenta con un tratamiento domiciliario que prolonga la duración de los rellenos de ácido hialurónico y corrige los efectos adversos más frecuentes a cualquier infiltración. Este tratamiento profesional se aplica exclusivamente en clínicas.