Para que nuestra piel esté hidratada naturalmente, elástica, firme y sin arrugas es necesario que el organismo produzca continuamente ácido hialurónico -además de colágeno y elastina-. El problema es que éste se rompe y excreta muy rápidamente.
De manera que, a los 40 años las reservas pasan al 50% y después de los 60 sólo queda un 10% de nuestro capital de ácido hialurónico.
Teoxane presenta Redensity 1, un ácido hialurónico que es prácticamente igual al que genera nuestro organismo.
"La cantidad que adquirimos a través de la alimentación -está presente en cartílagos y tendones de animales principalmente- no es suficiente para promover su síntesis, además, nuestro intestino delgado no es capaz de digerirlo al 100% porque su molécula es muy grande. De ahí que sea necesario aportarlo externamente, a través de infiltraciones. De hecho, el ácido hialurónico es el Ferrari de los fillers, ya que es una sustancia de relleno segura, biodegradable y reabsorbible", asegura la doctora Virtudes Ruíz.
Explica que la redensificación es un tratamiento para la corrección y prevención del envejecimiento cutáneo que activa las funciones de las células de la piel proporcionando una mejora en la textura, la luminosidad, la elasticidad y la hidratación.
Se realiza mediante microinyecciones o infiltraciones en abanico entre la dermis superficial y la dermis intermedia de Redensity 1, de Teoxane: un ácido hialurónico de alto peso molecular, no reticulado, que es prácticamente igual al que genera nuestro organismo, junto con un complejo dermorestructurante compuesto por 14 nutrientes (8 aminoácidos, 3 antioxidantes, 2 minerales y 1 vitamina).
Se recomiendan 3 sesiones con intervalos de tres semanas. Los resultados estéticos son visibles de inmediato, desde la primera sesión de inyección, pero mejoran con las repeticiones del tratamiento, ya que tiene un efecto acumulativo.
Con este tratamiento, a corto plazo se aprecia una hidratación profunda, una piel más uniforme y luminosa, y una mejora de la calidad cutánea (disminuye la rugosidad y la textura se vuele más suave).Este tratamiento es apto tanto para pieles jóvenes como para maduras. A edades tempranas, alrededor de los 30 años, ayuda a ralentizar la aparición de los signos de envejecimiento cutáneo.
Es un tratamiento para rejuvenecer la cara de bajo impacto, ya que mejora la piel sin cambiar el aspecto. "A partir de los primeros 10 días se nota una redensificación de la piel debido a la nueva producción de fibras de colágeno y elastina, una reparación cutánea y una uniformidad en el tono de la piel gracias a los aminoácidos, antioxidantes y vitaminas que incorpora. Este efecto perdura entre 6 y 9 meses", según la médico estético Paula Rosso.
A corto plazo se aprecia una hidratación profunda, una piel más uniforme y luminosa, y una mejora de la calidad cutánea (disminuye la rugosidad y la textura se vuele más suave). Y a largo plazo mejora la densidad de la piel, las líneas de expresión, la firmeza y elasticidad gracias a la producción de colágeno y elastina nuevos.