Una de las imperfecciones corporales más comunes es la laxitud de la piel. Este proceso fisiológico de envejecimiento de los tejidos aparece a diferentes edades, porque los factores de su aparición son tanto genéticos como de estilo y hábitos de vida. Las áreas más afectadas son el abdomen y la cara interna de los brazos, y los signos visibles son reducción de la hidratación de la piel, alteración de las fibras elásticas y el colágeno de la dermis, pérdida de turgencia y tono de la piel.
Según un estudio de mercado realizado por IBSA* (Institut Biochemical, S.A.), la mayoría de las mujeres no ven la laxitud de la piel del cuerpo como una imperfección o un pequeño defecto, sino como un verdadero problema que repercute en su bienestar emocional. Sienten que la ropa no les queda bien y abandonan la ropa ajustada o escotada prefiriendo tapar las zonas críticas.
¿Qué es Profhilo® Body?
Profhilo® Body es un ácido hialurónico ultrapuro de alto y bajo peso molecular en alta concentración, producido con un proceso térmico único e innovador, biocompatible, biodegradable, con una excelente capacidad de fluir por zonas amplias e integrarse uniformemente en los tejidos. Esta capacidad de distribución, de “fluir entre los tejidos” se debe a sus óptimas propiedades reológicas.
Es una solución no invasiva, reduce la posibilidad de aparición de hematomas e inflamación, asequible y con resultados rápidos que satisfacen a las pacientes.
Se recomienda un ciclo inicial de dos sesiones de tratamiento con un intervalo de treinta días entre sesiones, seguido de tratamientos de mantenimiento si fuera necesario.Indicaciones.
Está indicado para la redefinición del contorno y la remodelación de la flacidez corporal, especialmente en los brazos y abdomen, mejorando la calidad de la piel. Contrarresta la pérdida fisiológica del ácido hialurónico en los tejidos de la piel proporcionando hidratación, elasticidad y tono. Combina el tratamiento inyectable en la clínica con tratamiento cosmético de mantenimiento en casa.
Protocolo.
Se recomienda un ciclo inicial de dos sesiones de tratamiento con un intervalo de treinta días entre sesiones, seguido de tratamientos de mantenimiento si fuera necesario. El protocolo será indicado por un médico especialista en función del grado de envejecimiento de la paciente. Si fuera necesario se puede combinar con láser fraccionado, mesoterapia o carboxiterapia.
Prevenir la flacidez cutánea
Según la doctora Crispín, médico estético y nutricionista de Clínica Menorca, lo más importante es evitar el sedentarismo y llevar una dieta con el aporte proteico apropiado. La flacidez muscular y cutánea son distintas, pero un buen tono muscular es fundamental para un aspecto saludable de la piel. Se puede alternar el ejercicio físico con las plataformas vibratorias. En cuanto a la dieta, se recomienda, por supuesto, una dieta equilibrada como la mediterránea, que aporta todos los nutrientes necesarios, recordando que son las proteínas los pilares que sostienen el tono y la firmeza de la piel. Como aporte extra es aconsejable tomar antioxidantes, siempre bajo prescripción médica y ayudar a la contracción y nutrición de la piel con productos cosméticos y cosmecéuticos. Y los tratamientos médico estéticos, a partir de determinada edad ayudan a prevenir y retrasar el envejecimiento cutáneo.