La sostenibilidad y la ética están ganando terreno en la industria global y por supuesto, en la medicina estética y la cirugía plástica, áreas tradicionalmente impulsadas por la innovación tecnológica y el deseo de perfección.
Hoy en día, tanto los profesionales como los clientes saben de la importancia de prácticas que no solo buscan resultados óptimos, sino el mínimo impacto ambiental, la equidad social y el bienestar holístico del paciente.
Clínica Trevi, el último concepto en cirugía y medicina estética, nos cuenta en qué consiste este cambio de paradigma:
Se está haciendo un esfuerzo significativo para minimizar el uso de plásticos de un solo uso, promoviendo la sostenibilidad en la producción y el consumo de recursos.1.- Materiales sostenibles y biodegradables: los profesionales trabajan en el cambio; en tratamientos estéticos como rellenos dérmicos, reduciendo así el impacto ambiental y mejorando la seguridad del paciente. Además, se está haciendo un esfuerzo significativo para minimizar el uso de plásticos de un solo uso, promoviendo la sostenibilidad en la producción y el consumo de recursos.
2.- Prácticas éticas en comunicación y marketing: hoy en día todas las clínicas tienen su departamento de PR. Sin embargo, la promoción de procedimientos estéticos debe ser honesta y responsable, enfocándose en beneficios médicos y estableciendo expectativas realistas. Una publicidad ética también contribuye a la diversidad y la inclusión de los públicos y el target.
3.- Consentimiento y educación del cliente: garantizar que todos reciban una explicación detallada sobre los riesgos, beneficios y alternativas de los procedimientos es lo más importante. Esto además es la clave de una experiencia satisfactoria, feliz y segura.
4.- Perspectiva emocional: los sanitarios deben considerar la salud mental y las emociones de sus pacientes, evaluando que sus expectativas sean saludables antes de proceder con cualquier tratamiento. Esto incluye la identificación de posibles trastornos de la imagen corporal y, si fuera necesario, la derivación a un profesional de salud mental.
Es vital rechazar o posponer procedimientos cuando no son médicamente necesarios o no se van a alcanzar las expectativas del paciente.5.- Evitar intervenciones superfluas: es vital rechazar o posponer procedimientos cuando no son médicamente necesarios o no se van a alcanzar las expectativas del paciente.
6.- Seguimiento postoperatorio y apoyo profesional: esto garantiza una recuperación segura y exitosa, a través del compromiso con el bienestar del paciente. Hay que monitorizar la cicatrización, preveer complicaciones y ofrecer apoyo informativo y emocional.