"Por estética entiendo esto: el modo
en el que las cosas se muestran,
junto con las razones para preferir
una forma de mostrarse a otra”.
Arthur C. Danto, crítico
y profesor estadounidense
(1924-2013).
Se trata de uno de los medidores que nos ponen sobre aviso. Pasar por el quirófano por motivos de belleza, ya no es tabú. La encuesta de Estética Global Anual sobre los tratamientos realizados en 2017 de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica (ISAPS) muestra un incremento general del 5 por ciento en las intervenciones de cirugía estética en dicho ejercicio. En concreto, y en nuestro país, se realizaron un total de 398.350 intervenciones de cirugía estética el último año, según cifras de SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética).
La mejora de la apariencia del pecho, del contorno facial, el rejuvenecimiento facial y corporal, además de la piel, y una mejora del contorno corporal, es lo más demandado, señala la Sociedad Española de Cirugía Estética (SECE).
Y entre esta demanda, una intervención (en realidad, dos) estrella. Las operaciones combinadas o 'combo estético', lo que todos conocemos como un 2x1. Y en la que la denominada mommy makeover, una operación por la que muchas mamás optan tras el parto para retocar a la vez pecho y abdomen, ha dejado de ser de uso exclusivo de famosas y celebrities. Lo cual nos pone sobre aviso, la cirugía estética se populariza. Ahora sólo cabe preguntarnos si estamos preparados y somos nosotros los que vamos por delante de la oferta o es el consumidor quien nos obliga a hacerlo. En un caso u otro, sólo cabe estar preparado.
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