"Por estética entiendo esto: el modo
en que las cosas se muestran,
junto con las razones para preferir
una forma de mostrarse a otra".
Arthur C. Danto, crítico y profesor
estadounidense (1924-2013).
2022 va a ser, según todas las encuestas, un año de crecimiento para la medicina y la cirugía estética. Y si nos atenemos a las mismas y las conclusiones de ellas derivadas, tres van a ser los reyes de consultas y quirófanos.
Se trata del lifting facial, el tratamiento corporal y las operaciones de pecho. En concreto, dos procedimientos faciales quirúrgicos encabezan la lista: el estiramiento facial de plano profundo, diseñado para tratar los pómulos caídos, junto con la parte inferior de la cara, la línea de la mandíbula y el cuello, y la cirugía de reducción de la frente para crear una proporción facial más equilibrada.
En cuanto a los métodos mínimamente invasivos, la toxina botulínica y los rellenos dérmicos se colocan a la cabeza del rejuvenecimiento.
Pero lo mejor de todo ello no son solo los buenos augurios en torno al crecimiento de la cirugía y medicina estética, sino que los pacientes se muestran realmente satisfechos de los resultados obtenidos. Lo que promete un gran futuro y desarrollo del área que nos ocupa.
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