Una sonrisa atractiva depende de diversos factores, y uno de los más determinantes es el aspecto de los labios. Con motivo del Día Mundial de la Sonrisa, que se celebra el próximo día 5 de octubre, el doctor Óscar Junco, del Hospital Cima de Barcelona, nos ofrece un repaso de las características y tratamientos que hacen de los labios uno de los elementos más atractivos del rostro.
En primer lugar, el volumen uno de los rasgos más evidentes, aunque hay que tener en cuenta que en la moderación encontramos la virtud. Así, un exceso de volumen puede resultar, en muchos casos, contraproducente. La proporción es el segundo elemento a tomar en consideración: muchas personas tienen problemas por la diferencia de tamaño entre el labio inferior y el superior, especialmente frecuente cuando el inferior es el de mayor grosor.
Al estudiar una sonrisa, muchos se centran en la dentadura, que es algo muy importante, pero no debemos olvidar que los labios también lo son. Al fin y al cabo, los labios son el marco de la sonrisa.En tercer lugar, la armonía con el rostro también es importante. De esta manera, unos labios carnosos no serán siempre la mejor opción para según que rasgos faciales generales. Es aquí donde la opinión de un especialista conocedor de la materia se convierte en algo imprescindible.
Por último, la hidratación es la responsable de un aspecto saludable de los labios. Las agresiones externas hacen difícil a veces mantener esta zona convenientemente hidratada, así que lo mejor es recurrir a bálsamos e infiltraciones específicas de ácido hialurónico, además de beber agua en abundancia.
En cuanto al tratamiento más efectivo para lograr volumen, se trata precisamente de este último, en contra de la creencia popular que atribuye al bótox estas propiedades. El ácido hialurónico aporta elasticidad y naturalidad, mientras que el la toxina botulínica es más utilizada en zonas de la cara con mucho movimiento, donde aparecen arrugas con más facilidad (frente, entrecejo y contorno de ojos).