Las operaciones estéticas en la zona íntima de las mujeres son cada vez más demandadas, tal y como indican asociaciones, profesionales y estadísticas.
Este tipo de operaciones representaron el 1,5 por ciento del total de la cirugía estética en España en 2016, según datos de la SECPRE, Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética, mientras que en 2010, las mismas, eran casi desconocidas para la mayoría de pacientes y no existían apenas en las clínicas de medicina y cirugía estética.
Al parecer, este aumento de demanda se debe a que cada vez es menos tabú confiar problemas de salud íntima a los doctores, también en la consulta de medicina estética.
Entre las operaciones más demandadas en la zona genital femenina, la más solicitada es la labioplastia de reducción, que corrige el tamaño de los labios menores alargados incluyendo, si es necesario, el capuchón del clítoris.
También, la labioplastia de aumento, en la que se aumenta el volumen y la turgencia de los labios mayores, la liposucción del Monte de Venusy las vaginoplastias.
A todo lo cual se unen los tratamientos médicos no quirúrgicos que han surgido para tratar problemas como la sequedad y la tonicidad vaginal con ácido hialurónico y, mediante la aplicación de láseres específicos para esta zona contra la incontinencia urinaria o el dolor en las relaciones sexuales; también la irritación o el picor. Sin olvidar que la sequedad vulvovaginal también genera múltiples infecciones.
Intervenciones en definitiva, que además, mejoran la autoestima de la paciente.