"Tu cuerpo es templo de la naturaleza y del espíritu divino. Consérvalo sano; respétalo; estúdialo; concédele sus derechos."
Henri-Frédéric Amiel, poeta, filósofo, crítico y literario (1821-1888).
Carne de reality, la cirugía plástica se expresa en los medios de comunicación hoy día más como un juego que como un procedimiento quirúrgico y médico, que supone, no lo olvidemos, pasar por un quirófano. Es más, series y famosos 'made in Hollywood' recurren al mismo en medio de una engañosa frivolidad que da paso a numerosos 'docu realities', en los que operarse o pincharse bótox parece ser algo sencillo, cotidiano y sin riesgo. Casi más un capricho que una mejora estética que atiende a una necesidad real.
Pero no sólo eso, hace escasas fechas, saltaba la noticia, los 'Juegos de la Cirugía', una controvertida app al alcance de niños y adolescentes, sembraba la polémica, como ya lo habían hecho otras aplicaciones anteriores, caso de Nose Doctor Fun Kids Game, Celebrity Plastic Surgery Hospital o Little Skin Doctor Treatment Game, denunciadas por la fundación Endangered Bodies.
¿Cómo estamos educando en la percepción de su cuerpo a las generaciones venideras? La responsabilidad es de todos. Y el futuro de la cirugía plástica y estética pasa no sólo por la regulación que la delimite y controle. La sociedad como tal y el estamento médico de igual manera han de ser conscientes de los peligros derivados del uso frívolo de la misma. Sólo así evitaremos circunstancias tan desafortunadas como pensar que la cirugía es un juego para niños.
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