Una veintena de fisioterapeutas han participado en un curso organizado por el Colegio Oficial de Fisioterapeutas de Canarias (COFC) en el que han conocido las últimas técnicas de fisioterapia en el tratamiento del dolor pélvico crónico y las disfunciones sexuales dolorosas.

Y es que hasta un 68% de los afectados por disfunciones sexuales no consultan sobre su problema por vergüenza o porque no saben a quien dirigirse dentro del ámbito sanitario. De ahí la importante labor de los fisioterapeutas en este campo.

Los problemas sexuales afectan al estado de ánimo, la autoestima, el bienestar social y también a las relaciones interpersonales. Estas alteraciones merman la calidad de vida tanto de quienes las padecen como de sus parejas. Tienen un origen orgánico, psicológico o funcional, y muchas veces, el problema no es tratado por la falta de información del propio paciente.

El curso, impartido por tres especialistas del centro de fisioterapia de suelo pélvico RAPbarcelona, Laia Blanco Ratto, Stéphane Kaufmann e Inés Ramírez, se ha desarrollado en la sede colegial de Las Palmas de Gran Canaria y ha tenido una duración total de 30 horas lectivas.

Hasta un 68% de los afectados por disfunciones sexuales no consultan sobre su problema por vergüenza o porque no saben a quien dirigirse dentro del ámbito sanitario.

Durante su desarrollo, las fisioterapeutas catalanas han explicado que "es importante que la población conozca los beneficios de la fisioterapia dentro del tratamiento multidisciplinar", ya que los pacientes de este tipo de disfunciones se encuentran ante un abismo a la hora de afrontar su problema al no saber a quién dirigirse: "es tratado como un tema tabú y en la sanidad pública el personal sanitario no suele estar formado en el tratamiento específico". De hecho, afirman que "hay una escasa implantación de equipos que lo tratan en la sanidad pública, con la salvedad de los equipos oncológicos, por lo que la mayor parte de los tratamientos deben sufragarlos los propios pacientes", señalan.

Si bien en el Sistema Nacional de Salud ya se comienzan a tratar de forma generalizada, con personal especializado, las disfunciones de suelo pélvico, la incontinencia urinaria o de colon, así como el prolapso (desplazamiento de órganos como el útero, el recto o la vagina), "hasta el momento no hay una gran implantación de personal formado en el tratamiento de estas disfunciones", subrayan desde el Colegio Oficial de Fisioterapeutas canario.

Aunque a ojos de la población pueda parecer que hay una mayor incidencia en los hombres (principalmente por la disfunción eréctil o la eyaculación precoz), las estadísticas hechas públicas en Europa y en países como Estados Unidos han mostrado como, de hecho, hay una mayor prevalencia en las mujeres. "De hecho", explican Laia Blanco Ratto, Stéphane Kaufmann e Inés Ramírez, "entre un 20% de las mujeres jóvenes y alrededor de un 60% de las que ya tienen menopausia presentan algún síntoma de disfunción sexual: pérdida de interés, trastornos en el proceso de excitación, dificultades para alcanzar el orgasmo o la llamada dispareunia, que es cuando se experimenta dolor durante el coito".

En lo que respecta a los hombres, la disfunción eréctil tiene una prevalencia de un 19% de los españoles entre 25 y 70 años (afecta aproximadamente a dos millones de españoles).

Los fisioterapeutas canarios recuerdan que pueden contribuir de forma efectiva a ayudar a los pacientes en la parte que les corresponde del tratamiento. Es decir, en lo relacionado a las mujeres los especialistas se encargan de normalizar el espasmo o hipertonía vaginal, así como de mejorar su percepción de las estructuras musculares del periné. Con respecto a los hombres, la fisioterapia puede tratar la disfunción eréctil por fuga venosa, mejorar la situación de los nervios responsables de la erección, mejorar el tono de los músculos perineales que participan en el mantenimiento de la erección, mejorar la vascularización en la pelvis y el perineo y tratar la fibrosis en los cuerpos cavernosos, secundaria a traumatismos y cirugías.

Los fisioterapeutas también pueden ser decisivos en la impartición de cursos de educación sexual o en la aplicación de terapias de autoconocimiento y autoexploración más complejas que pueden favorecer la solución a muchas de estas alteraciones.

Principales disfunciones sexuales y el papel de la fisioterapia

HOMBRES

1) Disfunción eréctil: afecta a alrededor del 20% de los hombres en España, y a más del 60% de los que padecer cáncer de próstata. La fisioterapia complementa a los tratamientos de primera línea (fármacos o bombas de vacío) o segunda línea (cirugías, prótesis o inyecciones), con ejercicios de entrenamiento de musculatura del suelo pélvico (EMSP) para mejorar y/u optimizar la erección.

2) Eyaculación precoz: desde la fisioterapia, los ejercicios de EMSP contribuyen positivamente, junto a otros tratamientos aplicados, a retrasar la eyaculación una vez producida la penetración. Puede afectar a más del 30% de los hombres.

3) Enfermedad de Peyronie: esta enfermedad afecta del 3 al 9% de población masculina en el mundo, y consiste en una alteración estructural de los componentes fibroelásticos de la túnica albugínea (la cubierta del tejido cavernoso del pene). La fisioterapia puede actuar también a través de Ejercicios EMSP, la propiocepción y la impartición de pautas comportamentales tanto fisio como psicoterapéuticas.

MUJERES

1) Trastornos del interés sexual: cuando se produce una disminución o ausencia del deseo de la actividad sexual, la fisioterapia puede actuar cuando se descartan causas médicas a través de Ejercicios de Entrenamiento de Musculatura del Suelo Pélvico EMSP, o la reeducación postural/abdominal, siempre dentro del marco de un plan de tratamiento multidisciplinar.

2) Trastornos de la excitación sexual: se producen cuando hay incapacidad, persistente o recurrente para obtener o mantener, una vez iniciada la estimulación sexual de la mujer, los cambios fisiológicos propios de la fase de la excitación sexual (lubricación, tumescencia vaginal, tensión muscular).

En lo relacionado a las mujeres, los fisioterapeutas se encargan de normalizar el espasmo o hipertonía vaginal, así como de mejorar su percepción de las estructuras musculares del periné.

3) Trastornos orgásmicos: cuando hay ausencia o retraso marcado persistente o recurrente del orgasmo tras una fase de excitación sexual normal. La fisioterapia puede ayudar en la mejora de la vascularización, en el trabajo de la hipocontractilidad (Músculos Suelo Pélvico) y en el trabajo con la latencia del nervio dorsal del clítoris. Lo sufre el 24% de las mujeres en edad fértil.

4) Trastornos por dolor, o dispareunia: el dolor asociado al coito, durante o después de la penetración en el acto sexual, puede producirse en diversos grados o formas. La fisioterapia puede complementar a los tratamientos médicos con la con terapia manual, el masaje cicatricial, la diatermia, los EMSP, ejercicios respiratorios, abdominales, posturales o de electroestimulación.









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