Según datos de un estudio realizado por la consultora HMR, el 92% de los pacientes que requieren de un tratamiento facial opta rellenos dérmicos. Además, el estudio también refleja que el 81% de los centros someten a sus pacientes a peelings y el 54% a terapias de láser.
El ácido hialurónico sigue siendo el material más utilizado, aunque otras alternativas como la hidroxiapatita cálcica, la policaprolactona, así como del ácido poliláctico (relleno e hilos), van ganando terreno.
La Sociedad Española de Medicina Estética (SEME) ha colaborado en la elaboración de este estudio. La Doctora Petra Vega, presidenta de la SEME, destaca la seguridad de los rellenos utilizados en los centros médico-estéticos: "Cada material tiene sus ventajas y sus indicaciones, en cualquier caso la mayoría de estos materiales llevan muchos años testados y las complicaciones que puedan llegar a producirse, suelen ser leves y temporales, siempre que sean aplicados por un médico experto", señala la Dra. Vega, presidenta de la Sociedad Española de Medicina Estética, y advierte: "sin embargo, es importante que los lotes utilizados provengan de una casa comercial reconocida y que haya pasado los reglamentarios controles de calidad, así como que cuenten con su correspondiente autorización como producto sanitario inyectable".
La SEME ha percibido un mayor número de avisos de la AEMPS, informando de aquellos productos y medicamentos que han llegado a España con marcaje falso, sin tener la debida autorización.En los últimos años, la SEME ha percibido un mayor número de avisos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), informando de aquellos productos y medicamentos que han llegado a España con marcaje falso, sin tener la debida autorización. Además, en el estudio se recoge otra problemática de la que la Sociedad Española de Medicina Estética está al tanto y sobre la que trata de concienciar a la población: la inyección de estos rellenos por personal no médico. "El uso de productos sanitarios no testados o aplicados por personal no cualificado, sí supone un peligro para la salud pública. Por eso, es importante que los pacientes se informen detalladamente de qué producto va a ser utilizado (marca y composición), y que se aseguren de que su aplicación va a ser realizada por un médico, en un centro médico autorizado", subraya la presidenta de la SEME.
El gasto en productos de las clínicas privadas para el tratamiento con rellenos dérmicos alcanzará los 78 millones de euros este año, según se indica en el estudio.