El Dr. Junco analiza el rostro y cuerpo de la Reina Letizia
Según el doctor, la Reina cuida mucho su alimentación y solo se infiltra bótox y ácido hialurónico cuando toca
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Tras las últimas apariciones de la Reina Letizia, se ha vuelto a indagar sobre si se ha hecho retoques estéticos durante el confinamiento. El Dr. Junco analiza su rostro y cuerpo, y ha llegado a la conclusión de que la reina no es, ni mucho menos, como algunos indican, una adicta a los retoques.
Según el Dr. Junco, todo indica que Doña Letizia, de 48 años, desde que se casó, hace 16 años con 32, "recurre a tratamientos de medicina estética de forma regular, como cualquier otra persona que se cuida".

"La genética juega un papel importante en cuanto al inicio, la forma y la velocidad a la hora de envejecer, y en su caso juega un papel a favor. La Reina mantiene a raya los factores externos que agravan el envejecimiento, lo que significa que evita una alimentación desordenada, la poca hidratación, el alcohol en exceso, drogas, exposición solar, etc".
A partir de los 30-35 años, si se realiza un mínimo de tratamientos al año es posible prevenir y enlentecer el envejecimiento (además de embellecer), de forma más o menos natural, y sin un coste excesivo.

En general, a partir de los 30 años, bajo la experiencia del Dr. Junco, "los tratamientos vitales e indispensables para prevenir y enlentecer el envejecimiento a nivel profundo son el bótox y el ácido hialurónico".
El efecto del bótox dura realmente cuatro meses, pero se aconseja esperar al sexto mes para hacer la sesión de mantenimiento. Por tanto, con dos veces al año sería suficiente, es decir cada seis meses.
Existen dos resultados de aplicar el bótox. El más natural, donde se puede gesticular con mayor naturalidad sin marcar arrugas profundas dinámicas, "pero habrá algunas que se sigan marcando, eso confiere naturalidad y sobre todo movilidad o dinamismo en las expresiones faciales".
Y el más intenso, "de nariz hacia arriba no se mueve casi nada, no aparecen líneas de expresión en entrecejo, ni patas de gallo ni en frente".
Según el Dr. Junco, "hay pacientes que lo precisan, sobre todo, resulta indicado, cuando tienen una musculatura muy potente en frente, otros, lo demandan porque no quieren verse ni una arruga. La Reina Letizia sería de las del grupo B".
Por otro lado, explica que el ácido hialurónico es el sustituto de la grasa. A partir de los 30-35 años, la grasa interna y más superficial de la cara empieza a perderse y la piel empieza a descolgarse.
El Dr. Junco opina que "Doña Letizia se infiltra poca dosis de ácido hialurónico ya que por su estructura facial y la naturalidad de los resultados de pómulos hacía escote, no requiere grandes cantidades".
A estos tratamientos, le podemos sumar, según necesidades de cada uno, otros tratamientos más superficiales orientados a mejorar la calidad de la piel.

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