Asegura que a ella dedica su tiempo. "Mi vocación siempre ha sido la medicina y a ello dedico mi vida. Mi máxima es sin duda la satisfacción de mis pacientes".
La doctora Raquel Moreno Pentinel es una de las mayores expertas nacionales en el campo de la medicina estética y local ambassador de Allergan en España. Con una clara vocación, la Medicina Estética, Raquel confiesa que su pasión por la misma le permite "hacer que la gente se sienta bien, que pise fuerte y segura. No deja de asombrarme cada día cómo nuestro físico es capaz de subir o bajar nuestra autoestima".
Cofundadora de Medicina Estética ERES, junto al doctor Amir Tarighpeyma, ambos reconocidos profesionales en el campo de la medicina estética, ERES ofrece servicios de medicina estética, cirugía plástica y vascular, medicina capilar, ginecología y estética avanzada. Medicina Estética ERES cuenta con dos clínicas en Madrid.
Hoy, hablamos con Raquel Moreno acerca de un tema candente y mayormente recurrido en el campo de la medicina estética, las infiltraciones faciales con ácido hialurónico. Pero antes de entrar en materia, Moreno Pentinel revisa algunos de los fundamentos del éxito de su carrera: "Sólo una amplia experiencia y una formación continuada es capaz de permitir hacer un buen diagnóstico, el cual es clave, para realizar un tratamiento con éxito". La doctora Moreno sabe muy bien qué es lo que los pacientes necesitan y cómo llevarlo a cabo. "Como si de un arte se tratara", puntualiza. "Sólo si sabemos dónde tenemos que pulir, conseguiremos darle forma a una escultura. Mi labor es transmitirte ese diagnóstico al paciente, para que juntos logremos nuestra meta, que en definitiva, no es más que sacar la versión más bella de uno mismo".
El ácido hialurónico es una molécula que todos tenemos en nuestro propio cuerpo y, su misión, es la de mantener el nivel de hidratación en la piel.
La doctora Raquel Moreno, al frente de Clínica ERES, resuelve nuestras dudas más comunes acerca de uno de los tratamientos rey del antiaging y más demandados en el planeta. Un interesante recorrido y visión acerca de dichas infiltraciones que nos desvela algunos de los procesos y resultados más espectaculares de la que es una práctica recurrente y de notorios avances en el rejuvenecimiento del rostro.
Beauty Market: Empecemos por el principio, ¿qué es el ácido hialurónico y para qué se emplea en medicina estética?
Raquel Moreno: El ácido hialurónico es una molécula que todos tenemos en nuestro propio cuerpo y, su misión, es la de mantener el nivel de hidratación en la piel. Ofrece múltiples usos médico estéticos: rellenar arrugas, rejuvenecer, resaltar o corregir las facciones para potenciar la belleza de la persona, entre otros. Al ser, digamos un 'componente propio', cuando lo empleamos como material de relleno se integra perfectamente en el tejido, ofreciendo unos resultados muy naturales.
Sólo una amplia experiencia y una formación continuada es capaz de permitir hacer un buen diagnóstico, el cual es clave, para realizar un tratamiento con éxito
B.M.: ¿A partir de qué edad aconseja realizar estos tratamientos?
R.M.: Al ser tan versátil y, por tanto, ofrecer tantos usos, no hay un rango de edad. En gente joven se emplea para la mejora de facciones como el relleno de labios y pómulos y correcciones de ojeras o defectos en la nariz. A partir de los 30, el rostro empieza a perder volumen dando como resultado el efecto de 'cara cansada', que se puede contrarrestar con la infiltración de hialurónico. Finalmente, en las personas con más edad, se usa para rejuvenecer de manera global pues permite un efecto de 'levantado' facial.
B.M.: ¿Realmente puede corregir la nariz sin necesidad de cirugía?
R.M.: Es posible paliar muchas imperfecciones, pero no todas. Existen rasgos que, con este procedimiento, podemos mejorar de manera sencilla. Por ejemplo, corregir el hueso nasal para que no se vea el caballete, levantar la punta, hacer un apéndice más recto o que la nariz parezca más armónica en el rostro. Lo que no se puede es reducir el tamaño, ni la desviación.
En gente joven se emplea para la mejora de facciones como el relleno de labios y pómulos y correcciones de ojeras o defectos en la nariz.
B.M.: A menudo vemos rellenos faciales exagerados, especialmente en los labios, ¿cómo hay que proceder para resaltarlos de manera natural?
R.M.: El ácido hialurónico en los labios genera mucho miedo porque se ven casos de volúmenes exagerados o extraños. Es un tratamiento que, bien realizado, ofrece grandes resultados. Al integrarse completamente en el tejido se mueve con nuestro rostro, incluso cuando fruncimos los labios. El efecto final debe ser sutil, aunque también depende del gusto de cada paciente. Mi consejo es buscar un volumen que sea armónico con el resto de la cara y, para esto, el papel del médico estético es fundamental.
B.M.: ¿Algún efecto secundario destacado?
R.M.: Resulta mínimamente invasivo ya que se imparte con agujas muy pequeñas, muchas veces incluso con cánulas, agujas extremadamente finas que no tienen punta, con lo que evitamos los hematomas. El producto infiltrado incorpora lidocaína, por lo que el procedimiento es prácticamente indoloro. La sesión dura de 30 minutos a una hora.
B.M. ¿Cada cuánto tiempo se ha de revisar o volver a realizar?
R.M.: Para evitar las consecuencias exageradas por abuso que vemos en algunos famosos y celebrities, se debe hacer una vez al año o como mucho dos, pero sus efectos son muy duraderos, de 12 a 18 meses. Por ello, resulta una gran inversión en la mejora de la imagen de cualquier paciente. Con una sola sesión obtenemos resultados inmediatos que, además, se mantienen en el tiempo.