Tomás Zamora Iniesta es médico y cirujano de vocación desde hace más de 23 años. Con una larga y destacada trayectoria, el doctor Zamora es Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Murcia y especialista en Medicina Estética, Cosmética y Antienvejecimiento. Y lo suyo es el ejercicio de la que denomina 'Medicina Premium'.
Premiado y distinguido, partícipe de distintas publicaciones científicas, y habitual de talleres, workshops y ponencias, el doctor Tomás Zamora es en la actualidad Miembro de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME), Vocal de la Junta Directiva de la Asociación Murciana de Medicina Estética y Cirugía Cosmética (AMMECC) y Miembro de la Sociedad Española de Láser Médico Quirúrgico (SELMQ).
Este especialista, enamorado de su profesión, investigador y trabajador nato, acomete su último y nuevo reto con gran ilusión y no menores expectativas, además de resultados. Y es que Zamora acaba de abrir las puertas de la Clínica Ferraro, en el ABC Serrano de Madrid, "donde democratizamos la belleza, el cuidado y los tratamientos estéticos". Esa es su máxima, junto y por supuesto, a la excelencia.
Ferraro, Clínica de Medicina Estética es el resultado de años de estudio en este campo. Tras una profunda investigación y trabajo, "Ferraro nace con el propósito de ayudar a las personas que quieran sentirse bellas y mejor consigo mismas", nos adelanta el Dr. Zamora.
Así en esta clínica de nuevo cuño, que acumula no obstante el expertise de su dirección y plantilla líder, se aborda el global de la belleza y la ciencia del antiaging a través de diferentes tratamientos faciales y corporales, donde destaca la blefaroplastia sin necesidad de pasar por quirófano, o la reducción de surcos y arrugas, en el caso del rostro. Incluyendo en su oferta aparatología de última tecnología capaz de reducir centímetros y remodelar contornos, demostrable en una sola sesión, además de ayudar a reducir la celulitis y el tejido graso, si nos referimos al cuerpo.
Disponen también de tratamientos capilares que ayudan a frenar la caída y a detoxificar el cuero cabelludo, por ejemplo. Y en su equipo se incluyen médicos destinados a preparar a la mujer para el posparto o las precirugías y poscirugías; depilación láser como la facial o la electrodepilación para cualquier color de vello, incluido el blanco; eliminación de tatuajes y programas especiales para eventos.
Todos abordajes adecuados a cada paciente y con una visión diferente sobre la salud estética ya que en Clínica Ferraro se combinan las mejores máquinas del mercado con rituales desarrollados a partir de la sabiduría de la alquimia ancestral.
Sin duda, una clínica, Ferraro, nuevo referente en Medicina Estética y de la cual queremos saber más a través de la opinión de este cirujano especializado en medicina estética, el doctor Tomás Zamora, que hoy nos acompaña para descubrir también cuáles son los últimos avances y expectativas del área que nos ocupa.
En Clínica Ferraro hablamos, manejamos y proponemos un modelo integrador, donde medicina estética, cosmética y deporte se integran y van destinados al cuidado de las personas, al bienestar y la salud de la persona.
BEAUTYMED: ¿Qué es lo más novedoso en tratamientos de Medicina Estética en la clínica?
Dr. TOMÁS ZAMORA: Si he de destacar uno de los tratamientos, por encima de los enumerados al principio y que se practique en Ferraro Clínica de Medicina Estética, ése es, sin duda, y para corporal Deep Slim, tecnología española, con resultados sorprendentes sobre el tejido graso y el tejido conjuntivo.
B.M.: ¿Hacia dónde apunta el futuro de la Medicina Estética?
T.Z.: En corporal, a conseguir acompañar con la dieta y con el intercambio de volúmenes a que no aparezca la flacidez, y en el facial a ser menos intervencionista y proporcionar un aspecto cada vez más natural.
B.M.: ¿La medicina estética es en la actualidad asequible para el paciente en general?
T.Z.: Sí, pero con precaución, porque lo barato sale caro y el consumidor, el paciente, ha de pensar qué producto le están poniendo, en qué manos está confiando y en qué clínica está haciéndolo. No vale todo en medicina estética, al igual que no vale todo en cualquier cirugía, nadie se intercambiaría una válvula cardiaca por una comprada en Corea porque es más barata, todo lo contrario, elegiría un buen producto y no se jugaría la vida, su cuerpo, por nada que no fuera autorizado y con marcaje europeo y el mejor cirujano.
B.M.: La clínica Ferraro es multidisciplinar. ¿Por qué esta apuesta y la oferta a su vez de medicina estética, cosmética y/o tratamiento de lesiones deportivas, por ejemplo? ¿Es este el modelo del futuro?
T.Z.: Sí. Hablamos, manejamos y proponemos un modelo integrador, donde medicina estética, cosmética y deporte se integran y van destinados al cuidado de las personas, al bienestar y la salud de la persona, a sentirnos mejor.
En corporal, la medicina estética apunta a conseguir acompañar con la dieta y con el intercambio de volúmenes a que no aparezca la flacidez, y en el facial a ser menos intervencionista y proporcionar un aspecto cada vez más natural.
B.M.: ¿Qué lugar ocupa la Medicina Estética en nuestro país con respecto a Estados Unidos u otros países europeos referentes?
T.Z.: En España disfrutamos ya de un gran nivel de medicina estética. Quizá estamos por debajo de Estados Unidos, pero bastante por encima de Portugal, por ejemplo, haciendo cosas muy valoradas en Italia y seguidas por los Países del Este. Aún más en el caso de Latinoamérica; Latinoamérica se mira en nosotros.
B.M.: ¿Qué opina del turismo médico a destinos más baratos que incluyen estancias en hoteles, resorts y viajes de descanso y/o placer?
T.Z.: Pues que es un error, porque la Medicina es Medicina y los viajes, viajes son y probablemente, los viajeros, que son pacientes en primera instancia, necesiten de revisiones y de un ambiente médico, no turístico. Aunque ambos no sean totalmente incompatibles, sin embargo, venderlo como modelo de negocio ha de tratarse cuidadosamente.
B.M.: ¿Cuál es el valor añadido de Clínica Ferraro que le diferencia del resto de competencia?
T.Z.: La calidad, la calidad en general y por encima de todo. Ahora mismo Ferraro ha apostado por equipos de altísimo estándar, por una respuesta y trato al paciente de mucho, mucho nivel y un cuadro médico que atiende a los mismos parámetros, la calidad y el nivel. Queremos ocupar un espacio que hasta ahora, y puestos a hacer cadena de la clínica de medicina estética, no se ha conseguido. ¿Por qué? Pues porque las cadenas han ido al precio y no a la excelencia en el trabajo, que no es otra que la excelencia de la medicina. No hemos de olvidar nunca que estamos hablando de medicina.
Ferraro ha apostado por equipos de altísimo estándar, por una respuesta y trato al paciente de mucho, mucho nivel y un cuadro médico que atiende a los mismos parámetros, la calidad y el nivel.
B.M.: ¿A qué achaca el crecimiento de la demanda de Medicina Estética en el mundo?
T.Z.: Probablemente a la globalización, el mundo digital; las redes sociales... Ahora no estamos sólo frente a una única pantalla y no solo vemos lo que nos quieran enseñar. Ahora vemos el mundo real, a quién nos parecemos y a quién nos queremos parecer, y esto hace que deseemos experimentar cambios. El tiempo es otro, antes las mujeres a cierta edad dejaban de teñirse o huían del 'rubio de bote', ahora todo el mundo va a la peluquería y a cualquier edad, incluso el hombre, dando el salto, todos, hombres y mujeres, al cuidado y la belleza facial y corporal.
B.M.: ¿Cuándo medicina y cuándo cirugía estética?
T.Z.: La cirugía en realidad es más definitiva, pero hay que saber trabajarla con mesura. La medicina estética acompaña a la evolución del cuerpo y la cirugía estética provoca cambios drásticos en el cuerpo. Luego, hay que entender que una y otra tienen su espacio y su lugar. Cualquier solución más conservadora, siempre y de momento, será un acierto, porque revierte y no generará grandes cambios. Y la cirugía, mejor utilizarla cuando las cosas estén muy claras y queramos, necesitemos cambios drásticos.
B.M.: ¿La medicina estética es segura?
T.Z.: Según está regulada hoy en día, bajo los parámetros de las sociedades científicas, es absolutamente segura. Solo los centros que trabajan queriendo gastar menos o sin cumplir las normas, requisitos y formación necesaria, convierten a una disciplina muy segura en una auténtico caos.
B.M.: ¿Para quién? (Edad, sexo del paciente…)
T.Z.: La Medicina Estética no tiene edad. La única regla no escrita es ser racionales y tener una seguridad en lo que hacemos. Por supuesto, no vamos a hacer una intervención de medicina estética a un niño, pero sí podemos practicar una depilación láser si existe un problema de vello que le suponga bullying en el colegio, por ejemplo. Nunca se ha de dogmatizar, solo ser racional.
Los bioestimuladores lo que van a hacer son cambios muy poco a poco pero que van en la línea del cuidado y la prevención, como el que toma vitaminas para sentirse mejor.
B.M.: Hablando de tratamientos... ¿Qué opinión le merecen los tan ahora citados bioestimuladores frente a otros métodos ya clásicos como el bótox o el relleno?
T.Z.: Pues que los dos tienen cabida. El bótox y los rellenos son tratamientos y procedimientos que bien utilizados van a hacer que uno se sienta bien, que su aspecto y su rostro se muestren más relajados y más acordes con la edad que sientimos en el corazón. Y los bioestimuladores lo que van a hacer son cambios muy poco a poco pero que van en la línea del cuidado y la prevención, como el que toma vitaminas para sentirse mejor o el que toma proteínas cuando hace pesas, para que poquito a poco su propio organismo desarrolle ese tipo de sustancias.
B.M.: ¿La juventud es también vida saludable?
T.Z.: Por supuesto, la juventud es cuestión de tiempo, pero la vida saludable va a hacer que uno se sienta joven tenga los años que tenga.
B.M.: ¿Existirá alguna vez la juventud eterna?
T.F.: No (ríe) ¡Afortunadamente! Existirá la calidad de vida en el envejecimiento y el sentirse bien durante el envejecimiento.