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Médico estético especializado en tratamientos faciales y corporales, experto en rellenos e hilos tensores con varios cursos en tratamientos faciales completos, profesor en diferentes maestrías de medicina estética, miembro de la Sociedad Española de Medicina Estética, médico estético en Clínicas Dorsia, el Dr. Ariel Martín Romeo, es una de las figuras destacadas de esta disciplina en nuestro país.

Ponente habitual en los Congresos Beauty Contact Med, estrictamente profesionales y centrados en el área que nos ocupa para el desarrollo y networking de los especialistas y clínicas de la medicina y cirugía estética, el doctor Ariel posee una percepción dinámica, clara y preclara de la profesión que desarrolla con pasión y perfección extremas.

Un maestro de los procedimientos mínimamente invasivos, lo sabe todo del rejuvenecimiento en Medicina Estética. Y además de su labor en las prestigiosas Clínicas Dorsia, une a su currículum las especializaciones, licenciaturas y ejercicio como médico, homologado en 2007, Licenciado en Medicina y Máster en Medicina Estética, Universidad de Córdoba 2018. Además de perfeccionarse en la docencia y la pedagogía y otras ramas como Anestesia, Urgencias y Emergencias en Estética (SEMES-Andalucía, 2017), por ejemplo. Domina también materias como la alopecia, celulitis y adiposidad localizada, los inyectables, por supuesto (toxina botulínica, ácido hialurónico, hilos, implantes de relleno, bioestimuladores...) y técnicas en el manejo de insuficiencia veno-linfática (SEME, Sociedad Española de Medicina Estética).

Por eso hoy, y coincidiendo con él y su clase magistral acerca del 'Ácido Hialurónico y Remodelado Labial', con la que ha triunfado en la gira Beauty Contact Med 2023 y participando de nuevo en BC Med 2024, el doctor Ariel Martín Romeo Gentilini charla de manera distendida y clarificadora con www.beautymed.es.

BEAUTYMED: ¿Doctor, cuéntenos un poco y resúmanos cuáles son las bases y desarrollo de su ponencia aquí en Beauty Contact Med, con respecto al rejuvenecimiento y relleno de labios. ¿Qué es lo que pretende transmitir y enseñar a sus colegas y profesionales médico estéticos?
DOCTOR ARIEL MARTÍN ROMEO GENTILINI: Cuando me plantearon esta conferencia, primero que nada, quise enumerar e incidir en criterios básicos de la anatomía del rostro y la seguridad, adelantando los criterios básicos del diagnóstico, para saber hablar con el paciente y qué es lo que quiere frente a lo que necesita. En mi intervención y ponencia, 'Ácido Hialurónico y Remodelado Facial', pretendo y mi fin es que se entiendan técnicas, que se entiendan los productos y que se entienda que lo primero es la naturalidad. Tenemos que adecuar, ajustar, como médicos lo que quiere el paciente y lo que se le puede ofrecer a ese paciente.

BM.: ¿Desde cuándo lleva el doctor Martín Romeo Gentilini ejerciendo la medicina estética?
A.M.: Llevo siete años ejerciendo la medicina estética, primero con consultas privadas y públicas, y ahora soy absolutamente privado.

B.M.: ¿Qué es lo que más te gusta de su profesión?
A.M.: Me encanta la expresión y felicidad del paciente cuando se ve el resultado (dice él mismo con una sonrisa).

B.M.: ¿La medicina estética es para hombres y mujeres de cualquier edad?
A.M.: Afortunadamente, ese mito de que la belleza se escribe solo en femenino, se está derribando y ahora sabemos que tanto hombres como mujeres se acercan y confían en la medicina estética y que si bien se pueden hacer tratamientos de rejuvenecimiento cuando el paciente lo precisa, en general hacemos embellecimiento, cuando el paciente es joven y de rejuvenecimiento cuando es más mayor, por tanto, la medicina estética es también para cualquier edad.

B.M.: ¿Dónde quedan esos labios que tan mala fama crearon en medicina estética, gruesos, rellenos en exceso, que además eran irreversibles, a no ser que se hiciera una operación? ¿Qué es lo que se lleva ahora en ese sentido y qué tenemos que tener en cuenta como médicos estéticos a la hora de conseguir el mejor resultado?
A.M.: Efectivamente, el relleno permanente ha hecho muchísimo daño. En aquel entonces los labios no solo eran muy gruesos sino también feos, porque en su momento, cuando se hicieron, no se tenía en cuenta la anatomía del paciente y su transformación con el paso de los años, y tal y como decía, ahora esos labios hay que tratarlos con cirugía o con láser para intentar quitar el producto. La tendencia por suerte ha cambiado mucho y con los materiales semipermanentes de los que disponemos hoy día, sabemos que obtenemos resultados que permanecen durante ocho o nueve o diez meses, un año. Disfrutamos y moldeamos un labio natural que además, evoluciona según el envejecimiento del paciente.

B.M.: Al inyectar relleno de ácido hialurónico, se trabaja y da forma al labio para su proyección en pacientes de distintas edades, tal y como usted mismo ha explicado, teniendo en cuenta la anatomía y el paso del tiempo. ¿Estos inyectables, el relleno con ácido hialurónico, en concreto, también corrige el código de barras, y si no es así, cómo se trata?
A.M.: En lo referido al código de barras, y en general, el mejor tratamiento es el preventivo, porque cuando nos enfrentamos y hemos llegamos ya a una fractura dérmica, es difícil de corregir, con lo cual un perfilado labial puede frenar la inserción de esa arruga en el labio, pero no lo corrige. Así, para corregir, optamos por un enfoque diferente, empleando el láser, porque la corrección con ácido, y eso insistiendo muchas veces, da por contra mucha volumetría, pero no elimina la arruga. Puedo conseguir un 40% de reducción de la arruga del código de barras con ácido hialurónico, pero un 100% lo voy a conseguir con láser.

B.M.: Y otra duda, cuando hay un labio muy bonito gracias a la medicina estética y sin embargo, nos enfrentamos a un surco nasogeniano muy pronunciado, ¿ahí puede haber una distorsión de la imagen femenina y masculina?
A.M.: No, lo que tenemos es lo que yo siempre explico a mis pacientes. Hemos de optar por un rejuvenecimiento y embellecimiento total. volvemos al estudio de la anatomía. Un acceso peri bucal y tratar el rostro al completo, y no y solo sectores diferentes, porque si no procedemos de este modo tendremos una zona muy bonita y todo lo de alrededor será deslucido. Entonces, tratar el surco nasogeniano, tratar una arruga de marioneta, tratar un código de barras es lo que hay que hacer cuando uno se enfoca en un labio (dice con gran seguridad nuestro especialista), si no, no merece la pena.

B.M.: ¿Cómo aborda el Dr. Ariel Martín Romeo y cómo enfrenta el tratamiento del tercio inferior, el rejuvenecimiento del tercio inferior del rostro de una paciente?
A.M.: Técnicamente el denominado popularmente como bótox es solo para el tercio superior: patas de gallo, entrecejo y frente. Si bien, existen técnicas que son off label de toxina que se pueden utilizar para corrección de, por ejemplo, el código de barras, o por ejemplo en un descenso del labio y ahí se decide si utilizarse o no. Aunque yo siempre digo en este caso que hay un montón de técnicas que son mucho más seguras y dan mucho mejor resultado. Y en cuanto al tercio inferior, se necesitaría mucho producto en cuanto a bótox, porque todo ese tejido descendido hay que revivirlo desde el tercio superior, empezando a subir capa por capa, lo que también encarece el tratamiento.

B.M.: ¿Cuándo aconseja el uso de cirugía?
A.M.: Yo creo que hay que ser realista con lo que uno quiere conseguir. Nosotros, con medicina estética podemos mejorar muchas cosas. Sin embargo, la solución definitiva hay veces que es la cirugía, efectivamente, cuando hay mucho exceso de piel y con mucha flaccidez.

B.M.: ¿El bótox sigue siendo el rey?
A.M.: Creo que la toxina botulínica es el tratamiento número uno más vendido en todo el mundo. Creo que es la mejor manera de entrar, como paciente, en la medicina estética. Porque uno no pierde el tiempo y le pierde el miedo a la consulta, también el especialista, el médico, que gana tiempo de tratamiento con las arrugas. Pienso, efectivamente que es la mejor puerta de entrada a esta especialidad y es como se suman pacientes convencidos que descubren que se pueden hacer cosas sin miedo.

B.M.: ¿Cuándo empezar con la medicina estética, a qué edad?
A.M.: Como he adelantado anteriormente, existe el embellecimiento y el rejuvenecimiento. Las nuevas tendencias apuntan a nuevas edades, más jóvenes, donde empezar a confrontar y prevenir para verse mejor, sin llegar a ese punto de tratamiento del envejecimiento. Así se postergan lo signos del paso del tiempo y se alarga el tiempo para una cirugía. Hay que destacar que perdemos un 1% de colágeno anual desde el momento que nacemos y empezamos a ver esa pérdida de colágeno alrededor de los 30 años. Yo creo que 30 años es un buen momento para comenzar a visitar al médico estético.

B.M.: ¿Qué tiene que observar el especialista, el médico estético a la hora de elegir un producto de relleno?
A.M.: ¡Buena pregunta! (nos sonríe de nuevo cómplice el doctor Ariel Martín). En general son tres cosas las que tenemos que valorar en primer lugar: la elasticidad, la cohesividad y la viscosidad del producto. Además del tipo de jeringa, la modalidad en que la podemos inyectar si es cánula, si es aguja... El mercado ha crecido mucho en los últimos tiempos y existe gran variedad de producto entre el que elegir, pero personalmente a mí me gusta trabajar con una marca en particular de la cual participo y soy formador, además, me refiero a Allergan. Elijo seguridad, elijo marca mundial y mayor número de jeringas inyectadas porque sé que me va a dar sí o sí un resultado excepcional.

B.M.: ¿Y los hilos tensores cuándo los elegimos y para qué?
A.M.: Los hilos tensores la verdad que es un complemento perfecto a las infiltraciones de ácido hialurónico. No hay tratamiento que no sea complementario en esto de la medicina estética. Los hilos son una buena opción para tensar una vez se han repuesto los volúmenes. De hecho, la reposición de volumen y el tensado son pasos complementarios en el mismo tratamiento. Los hilos tensores se eligen una vez que tenemos todos los volúmenes repletos. Una vez que queremos terminar de dar ese empujoncito a la piel donde no llegamos con el retroceso y además, como inductores de colágeno que son además los hilos y sus distintas clases.

B.M.: ¿Y qué hacemos con el cuello?
A.M.: ¡El cuello tiene mil soluciones!, aunque a priori no se perciba así. En general, optamos por la inducción de colágeno. Los inductores de colágeno dna muy buen resultado. Y un consejo, lo ideal es que la aplicación del protector solar no se corte en la base del cuello, sino que se siga hasta hasta el pecho y el escote, porque las mujeres tienen mucho tiempo expuesto el escote y el cuello al sol y los factores externos y es difícil intentar pelear contra algo que está todo el tiempo en guerra contra el sol. Hemos de tener en cuenta que la primera causa de envejecimiento de la piel es el sol.

B.M.: ¿Me gustaría centrarme ahora en los denominados bioestimuladores. ¿Qué le parece esta nueva corriente de inyectables que no rellenan en realidad, sino que en realidad se presentan como aliados de eterna juventud y estimulación de la misma?
A.M.: A mí, particularmente, me gustan mucho. Hay dos tendencias, bioregeneradores y bioestimuladores. Los bioregeneradores lo que hacen es regenerar una capa superficial que se despega con los años, que es más leve. Y los estimuladores lo que hacen es inducir a la estimulación de colágeno, contrarrestando esa pérdida de colágeno progresiva que sufrimos de forma fisiológica. Hay muchos en el mercado. Desde el lifting líquido al ácido poliláctico, la policaprolactona, el hidroxiapatita de calcio... Son un complemento perfecto al ácido hialurónico. Son una manera de recuperar tensión. Es cierto que no dan volumen, pero algunas veces los hundimientos no necesitan un extra desmedido de volumen. Y es cierto que esas grandes caras que circulan por ahí han hecho que la gente tenga terror a los volúmenes. Pero un volumen aplicado en su justa medida en una zona de pérdidas se ve bien. Ahí es donde el médico estético demuestra su maestría.

B.M.: Ácido hialurónico, hilos... ¿también en corporal? ¿Dónde los pondría? ¿Dónde los aconseja? Sobre todo para la reafirmación, tras el paso del tiempo. ¿En brazos, piernas...?
A.M.: Personalmente, los uso en todo el cuerpo, desde cara interna de brazos, cara interna de muslos, rodillas, abdomen... Los uso en todos lados (dice convencido). El PDO es un estimulador de colágeno muy bueno. Entonces, a lo largo del tiempo uno puede hacer un mallado que consigue tensar bastante la piel, con lo cual, este es nuestro punto número uno en lo referido al uso de los hilos y el ácido hialurónico en corporal. Punto número dos, son un complemento perfecto a cualquier estimulador. Hemos de resaltar y tener en cuenta que los estimuladores en piel delgada y descolgada van muy bien. Hay estimuladores para la cara interna de brazo, estimuladores para cara interna de muslos y estimuladores en abdomen. Funcionan super bien cuando se los elige. Hay que ser consciente, no obstante, e incido de nuevo, de la pérdida paulatina de colágeno con los años El colágeno y los hilos son ideales si la flaccidez no es exagerada. Mejorará, pero no se resolverá. Aquí hay que sopesar si esto es suficiente para el paciente.

B.M.: ¿Cree el Dr. Ariel que la sociedad reconoce al médico estético como tal, cómo médico? ¿O todavía todavía queda mucho recorrido por hacer en este sentido?
A.M.: Considero que al no ser todavía una especialidad y ser parte de un máster, si bien nosotros tenemos años de estudio y experiencia y hacemos un MIR, aún no se nos reconoce por la mayoría y/o al cien por cien como doctores, como médicos... Por parte de algunos se interpreta que nuestra práctica no es del todo médica y que nos dedicamos a la belleza en mayor cuantía. Sin duda, hemos de resolver esta situación lo antes posible. Esta percepción errónea o equivocada, hace que todavía haya gente que inyecta en lugares y con personas sin el título de médico y la gente no lo sabe porque no se informa ni reconoce que es de vital importancia ponerse en manos de un médico estético certificado y homologado. Hay gente inyectando en trastiendas sin título ninguno, hombres y mujeres que caen en sus redes, y después sufren las consecuencias... Malos resultados y algunos casos realmente graves...