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Directora y fundadora de la clínica que lleva su nombre, Clínica Curull, fundada en el año 1995. Conchita Curull es una de las odontólogas más reconocidas de nuestro país, al frente además no sólo de la mejor y más exquisita atención a sus pacientes, sino también a la cabeza en innovación. Curull, especialista reconocida tanto dentro como fuera de nuestras fronteras ha sido pionera de métodos como el escáner intraoral en tres dimensiones que confecciona piezas perfectas o el análisis digital de la sonrisa con el que cualquiera accede al diseño real y más favorecedor de su boca. Y ahora también de los implantes zigomáticos, innovador procedimiento Zaga que utiliza el hueso del pómulo para colocar dientes fijos en pacientes que han perdido el hueso maxilar, en los que no se pueden colocar implantes regulares.

Mucho ha avanzado la odontología y la estética o belleza dental desde la década de los 90, cuando Clínica Curull abriera sus puertas y hasta ahora. De hecho, la odontología concebida como la belleza de la sonrisa estaba aún lejana y la mayoría acudía al dentista sólo cuando se trataba de algo urgente, perentorio y no había más remedio, una caries, una pieza que se movía, un sangrado de encías..."En aquel entonces se carecía de la cultura del dentista como especialista y experto en belleza dental", nos explica la doctora Curull. "La gente acudía al dentista para solucionar un problema puntual, pero el concepto de odontología estética y de la salud buco dental como algo continuado y periódico no se daba del modo que lo concebimos ahora. Así como la medicina estética se encontraba en boga y pleno auge, la estética dental, no".

Beauty Market: Mucho ha evolucionado desde entonces y hasta ahora la odontología en general y el paciente y su percepción de esta especialidad médica.
Conchita Curull: Sí, así es. Fue por aquel entonces que poco a poco, surgieron determinadas demandas entre un estrato de la población y una generación muy concreta de hombres y mujeres, los comprendidos entre los 35 y 55 años. Estos empezaron a solicitar otro tipo de servicios referidos a la conservación y belleza dental. Dicha población comprendió que si te cuidas el cuerpo también te tienes que cuidar la boca, los dientes. Y ante estas nuevas necesidades comenzaron a surgir con gran éxito los tratamientos de estética dental, blanqueamientos, carillas, ortodoncias...

B.M.: De aquel despegue y hasta ahora, entre medias, una crisis. ¿Cómo ha sido la propia evolución de Clínica Curull a lo largo de estas décadas?
C.C.: Clinica Curull, como centro, ha sabido evolucionar al compás de los tiempos y centrarse en proporcionar las respuestas adecuadas a la demanda puntual de cada etapa. Nos centramos en el estudio de la salud buco dental y comenzamos a avanzar en esta dirección. Por eso, tampoco notamos realmente los embates de la crisis económica. De hecho, el sector sanitario fue de los pocos que la notó pero muy sutilmente. De modo más reciente, desde 2016 aproximadamente, en odontología ya no se habla de crisis. Siempre referido a las clínicas que han sabido evolucionar, las que se han quedado en una mera consulta con un solo dentista, que no ofrecen otras perspectivas ni cubren otras expectativas, en éstas, sí ha hecho mella la realidad económica.

B.M.: En dicha coyuntura, hemos de hacer referencia también a la aparición de las cadenas dentales. ¿Qué han supuesto y representan en el panorama general de las consultas de los odontólogos las franquicias?
C.C.: Las grandes cadenas de dentistas trastornaron sin duda a la odontología en general y a las clínicas convencionales. Aunque dicha situación también ha concluido en cosas buenas para el resto. Las cadenas de clínicas dentales han acercado a la sociedad la odontología, porque su propia naturaleza de cadena les permitía poder realizar campañas de publicidad muy potentes, lo que 'popularizó' esta especialidad y el acudir en general al dentista. Si, supuso en su momento una competencia muy fuerte pero el lado positivo de todo ello y en lo que nos repercutió a todos en general es en el hecho de que la gente tomó conciencia de modo general de que hay que ir al dentista.

B.M.: Hablamos de un concepto de clínica que también se ha transformado, como decía usted misma, desde un solo dentista a una consulta multidisciplinar.
C.C.: Sí, el concepto de clínica dental ha cambiado mucho en los últimos años. Antes era la típica consulta de un dentista que hacía de todo, como decía, y el concepto actual es hacer clínica, consulta, con especialistas. Éste es el modelo que se está implantando y va a implantarse y que va a tener más futuro en lo referido a la odontología.

B.M.: En este orden de cosas, ¿existe el intrusismo en odontología?
C.C.: Sí y lo padecemos todos y cada día. Porque el problema que existe en España es que cualquier persona puede abrir una clínica dental. Contratas a un dentista y no hace falta nada más para poner en marcha tu propio centro. También está el tema del protésico dental, por ejemplo, que trabaja con los pacientes y no debería. El protésico no puede realizar las tareas de un odontólogo, pero en nuestro país, ocurre. Desde el Consejo de Odontólogos y los colegios profesionales estamos luchando para clarificar y poner freno a esta situación. Una realidad que además incorpora otras variables que igualmente nos perjudican. Frente a ello, otra situación ilógica es que yo como dentista no pueda abrir un laboratorio dental, España es el único país de Europa en el que ocurre esto. Incongruencias que nos afectan de lleno, y no sólo a este sector sino a otros también, desgraciadamente, en nuestro país.

B.M.: Como especialista, como doctora y odontóloga pionera y reconocida, ¿cómo se recicla la doctora Curull para dar cabida y ofrecer métodos tan avanzados, llamativos y eficaces cómo los que caracterizan a su clínica y servicio?
C.C.: En todas las ramas de la medicina y en la odontología también has de estar formándote contínuamente, porque esta especialidad, como muchas otras, cambia, transformándose en cada momento y mucho en lo referido a tratamientos, técnicas, soluciones dentales, diagnóstico... Asistimos periódicamente y con frecuencia a congresos nacionales e internacionales. En mi caso soy también miembro de distintas asociaciones nacionales y otras europeas o mundiales y acudo a cursos de distinta naturaleza, conferencias, talleres. Con ello consigues ponerte al día al momento sobre todo lo que acontece y es noticia y novedad en odontología, una rama que avanza a pasos de gigante. Luego, efectivamente, habrá cosas que te gusten más o menos o no te convenzan, pero el ritmo y la sociedad actual te exigen ya no sólo estar actualizado sino innovar siempre, porque incluso el paciente, hoy, así lo requiere, así lo demanda. Todo lo cual y de modo global suma y le dota de un gran valor a tu trabajo y a tu clínica. En este apartado y capítulo he de puntualizar que no sólo me formo yo, sino todo mi equipo, porque la clínica Curull es un equipo, un equipo de profesionales y especialistas en todas las áreas que componen una empresa en general y en lo referido a la odontología en particular.

B.M.: ¿Qué lugar ocupa nuestro país en lo referido a servicios y avances dentales?
C.C.: Somos de los primeros. Los brasileños, por ejemplo, practican una odontología muy destacada, han sido grandes visionarios. Estados Unidos, por supuesto, está en los puestos de cabeza. Italia también, muy en la vanguardia en lo referido a estética y salud buco dental. Y en España, reitero, practicamos una odontología de muy, muy alto nivel.

B.M.: Hasta aquí, ha citado en varias ocasiones y destacado la evolución del paciente en odontología. Pero nos encontramos también con otra variable que es la del precio, pacientes que debido a ello, al precio, sólo acuden a consulta cuando no hay más remedio. ¿Esto continúa ocurriendo o cada vez es más factible y accesible en este sentido acudir al odontólogo?
C.C.: Cuando tienes cualquier tipo de negocio, al fin y al cabo, una clínica de odontología es un negocio, has de decidir cuál quieres que sea tu tipo de cliente. Nosotros, en Clínica Curull no nos enfocamos en la persona que solo mira el precio, existen otros centros, otros profesionales en los que sí es éste el objetivo. Yo les digo a mis pacientes que siempre van a encontrar a alguien que lo haga más barato que yo, pero Clínica Curull ofrece otro tipo de servicio, por lo que estos, los pacientes, han de valorar mi currículum, mis instalaciones, lo que yo les ofrezco; tecnología, inversiones, digitalización... Todo lo cual hace posible que los tratamientos sean mucho más efectivos y previsibles. Ante el paciente que demanda estética, o estás al día o lo pierdes. Porque antes, en odontología no había estética, pero ahora sí, un valor añadido que prestigia y suma y que selecciona al propio paciente. La línea que marca la diferencia. Quien está al día puede ofrecer un resultado estético espectacular y eso por supuesto posee un valor.

B.M.: ¿Cuál es la boca perfecta?
C.C.: La natural, una boca, unos dientes que nadie note que 'no son de verdad', entre comillas. Una boca que nos mejore y nos haga sentir y vernos a los ojos de los demás, más guapos, y nos pregunten, ¿qué te has hecho? Estás fantástica o fantástico. En verdad, no te has hecho nada, sólo te has arreglado los dientes como se suele decir, pero la gente te ve más guapo, más joven; mejor. Por eso son tan importantes las herramientas que la nueva odontología pone a nuestro alcance, caso del análisis digital de la sonrisa, Digital Smile Design, porque posibilita personalizar la sonrisa según cada fisionomía e individuo. Es decir, no tratamos una boca en serie, como lo haríamos con cualquier otro, que todavía hay muchos dentistas que lo hacen, sino que digitalizamos y personalizamos en función de los rasgos faciales y estructura. Huímos de las bocas artificiales, todas iguales, y donde se ve perfectamente que la persona lleva una prótesis o unas carillas. El Digital Smile Design nos permite decidir en función de cada rasgo y peculiaridad. Diseñamos así el tamaño de los dientes, la forma, el color; según los labios, los gestos, la sonrisa, expresión; la piel, incluso la estatura, si el paciente mide metro noventa o un metro sesenta centímetros. Muchos factores que se analizan y te ayudan a crear esos dientes de la forma mejor y más natural posible.

B.M.: En este caso, ¿estamos hablando sólo de diente o también de encía?
C.C.: También de encía, por supuesto. Porque la boca es parte rosa y parte blanca. Antes tampoco se le daba a la encía la importancia que tenía. Podías optar por ponerte unas fundas blanquísimas pero si tenías una encía roja, inflamada, que sangraba o sonreías con lo que denominamos sonrisa gingival, en la que enseñas muchísima encía, el resultado final no es completamente estético, porque todo esto afea la boca. El resultado, si no se tiene en cuenta la encía, no será satisfactorio ni excelente y el paciente no se encontrará satisfecho, sino todo lo contrario. Pero todo esto, se puede corregir hoy en día. Volvemos de nuevo al concepto de estética y belleza dental como un todo, no como una mera visita a un dentista y poco más.

B.M.: ¿Cómo reacciona un posible cliente y paciente gracias a este programa que diseña la sonrisa cuando ve y observa al detalle la que podría ser su posible, definitiva y futura boca perfecta?
C.C.: Esta es una herramienta sorprendente que además nos has sido muy útil a nosotros como profesionales a la hora de diagnosticar y prescribir y comprobar cómo resultará el tratamiento. Pero sobre todo, efectivamente, se trata de una herramienta clave de la comunicación con el paciente, porque a veces, por mucho que expliques la visualización final, es complicada, difícil de transmitir e imaginar. El hecho de que la persona pueda ver en una imagen en el ordenador cómo va a ser real y finalmente su sonrisa es no sólo gratificante y sorprendente sino que también facilita la comprensión de todo el tratamiento que va a venir después. Pero no sólo eso, esta imagen también la utilizamos para comunicarnos con los técnicos del laboratorio, quienes van a hacer las carillas o las prótesis. Pero aún hay más, el análisis digital de la sonrisa no sólo permite la visualización digital sino también física, construyes el molde de la imagen el cual puedes colocar de manera previa en la boca del paciente, lo superpones para que éste compruebe y disfrute ya del resultado. Y, no ponemos el espejo inmediatamente después delante de la persona, sino que filmamos un video con y sin el molde para que sea él mismo quién pueda comprobar de este modo la gran mejora que supone. Es algo impactante. Además, si existe algo con lo que previamente no esté conforme el paciente, se corrige, atendiendo siempre toda y cualquier necesidad o detalle antes de empezar a trabajar, anteponiendo soluciones a cualquier duda o cuestión que la persona apunte, según sus gustos y propias percepciones. Y todo con un presupuesto cerrado, porque ya sabes todo lo que vas a hacer, y eso también al cliente le motiva y le convence y entusiasma.

B.M.: ¿Desde cuando está funcionando este sistema digital de análisis de la sonrisa?
C.C.: Nosotros fuimos, no sé si la primera, pero sí de las primeras clínicas en España que nos decidimos por dicho análisis digital. Una novedad que nos llegó desde Brasil y con cuyos doctores decidimos formarnos. Y en 2014 comenzamos ya a utilizarlo en nuestra consulta. Algo muy novedoso y revolucionario que posteriormente también fuimos invitados a exponer en distintos congresos y jornadas.

B.M.: Y en cuanto a novedades y avances, ¿qué más podemos destacar en general en estética dental y en concreto y particular en Clínica Curull?
C.C.: Todo apunta, como hemos comentado, hacia la digitalización. Antes se trataba de la fotografía, para pasar luego a la radiología 3D y la confección de moldes que en el pasado se realizaban con pasta de manera manual y que ahora se confeccionan directamente con un escáner en la boca del paciente, un escáner intraoral. Y el futuro inmediato, que Clínica Curull va a presentar ya, es la unificación de estas tres herramientas. El análisis digital de la sonrisa, la radiología 3D y el escáner intraoral. Lo que nos permitirá llevar a cabo un plan de tratamiento superexhaustivo y predecible, sin fallos y sin pérdida de tiempo y pruebas innecesarias, ni sorpresas no deseadas. El error no existe prácticamente.

B.M.: ¿Los implantes son el presente y futuro de la odontología?
C.C.: Yo diría que el pasado. Ya nadie concibe hacer un puente como los de antes. El implante está totalmente integrado en la estética y salud buco dental. Supuso una transformación completa de esta profesión y sus actuaciones, aportando naturalidad absoluta y la sensación de que disfrutamos de nuestro propio diente, que no se mueve, se fija y alinea con el resto. Como también lo ha hecho la ortodoncia invisible, que ha calado incluso en la población adulta, sin molestias, fácil de usar y limpiar, correctores que no se notan. A todo lo cual vuelvo a citar y sumo la digitalización, la tercera gran revolución de esta rama de la medicina.

B.M.: ¿El cliente que acude al dentista buscando la belleza de sus dientes y sonrisa, aumenta en número, continúa creciendo en lo referido a demanda buco dental?
C.C.: Sí. Sobre todo la generación, hoy alrededor de los 50 años, educada en el bienestar y que quiere envejecer bien, con salud y calidad de vida a todos los niveles. Personas que se cuidan, acuden al gimnasio, a la medicina estética, a los masajes y tratamientos de belleza y que considera la belleza y salud de su boca fundamental. Gente que quiere estar y verse bien. En general, he de decir que además de ellos, la sociedad es cada vez más consciente de la necesidad de acudir al dentista a todos los niveles, salud y belleza.

B.M.: La salud, capítulo prioritario. Pudiera parecer incluso que estamos más preoucupados en la actualidad por la belleza de los dientes que por la salud en general de nuestra boca. ¿Somos conscientes de que es el dentista nuestro médico de cabecera, el especialista que atiende las enfermedades en general buco dentales y no sólo el diente en concreto que posee una caries o se mueve?
C.C.: Aquí sí he de decir que todavía observamos cierto desonocimiento al respecto. Yo formo parte por ejemplo de la Asociación Nacional de Periodoncia que lleva a cabo una labor muy importante en lo referido a concienciar a la población de la relación que existe entre la salud buco dental y la salud general de nuestro organismo. Una labor en la que muchas veces es el propio médico especialista, el ginecólogo, el endocrino, el cardiólogo..., el que no incide e incluso desconoce esta relación. En este sentido, desde la Asociación citada, la referida a la periodoncia en nuestro país, se está realizando un trabajo de campo vital, contactando por ejemplo con cardiólgos, médicos de cabecera, estomatólogos y distintas y muchas especialidades para explicar esta relación y que estos médicos a su vez valoren e incorporen en sus consultas y expliquen a sus pacientes la necesidad del diagnóstico buco dental. Intentamos educar a este respecto. La boca tiene relación con muchísimas patologías, incluído por ejemplo el rendimiento deportivo. Un paso que no sé si va a ser inmediato pero sobre el cual se está tomando ya conciencia. Acudir al odontólogo se va a convertir, pienso que en un futuro inmediato, en un visita más como cualquier otra que hagamos cada año a cualquier especialista para chequear nuestro estado de salud.

B.M.: Y en cuanto al cuidado diario de la boca en casa, en el hogar, ¿hemos evolucionado? ¿Qué nos saltamos, si es que lo hacemos? ¿Qué nos falta aún por hacer?
C.C..: Esto ha cambiado muchísimo. Claro está, todavía hay personas que no se cepillan los dientes, por desgracia y en su propio perjuicio, pero cada vez menos. Sí es cierto que somos todos en general más conscientes acerca de cómo, cuándo y por qué observar la higiene diaria de nuestros dientes. Aunque, muchas veces no lo hacemos bien. Es el dentista a quien debemos preguntar y quien debe explicarnos y recomendar cómo debe ser la limpieza diaria, modelos de cepillo, minutos, formas y número de veces del cepillado y limpieza diaria.

B.M.: ¿Tres veces al día?
C.C.: No es necesario, no se trata de cantidad sino de calidad. Nosotros recomendamos el cepillado de la mañana y el de la noche, éste sí es fundamental, el cual nosotros aconsejamos complementarlo con hilo dental y enjuague bucal.

B.M.: ¿Y qué opina Conchita Curull y la odontología en general de esta moda de los blanqueadores dentales, que parece causar furor y que se hacen en casa?
C.C.: Fatal. Porque el blanqueamiento es un tratamiento. Imagínese que cualquiera se hiciera un peeling ablativo en su casa, las consecuencias serían nefastas. Pues lo mismo ocurre con esta moda del blanqueamiento de cualquier modo y en todo lugar. Puedes tener gingivitis o caries o recesiones, y perjudicar gravemente a tus dientes y encías. Además, si la boca previamente no está limpia como corresponde, acudiendo a una clínica odontológica, estos blanqueamientos no arrojarán tampoco resultados reales. No todas las personas son candidatas a priori a un blanqueamiento por las causas citadas, por eso ha de estar hecho y supervisado por un dentista. Hablamos y volvemos a incidir, por encima de todo, de salud. La salud de nuestra boca.