Es una de las cirugías más demandadas tanto por hombres como por mujeres. Poner fin definitivamente al párpado caído o a las bolsas de los ojos a través de una operación quirúrgica, denominada Blefaroplastia.
La edad es uno de los principales factores que hacen que la piel del párpado superior se descuelgue. No obstante, existen otras causas, a veces olvidadas, pero muy significativas para que esto ocurra o se potencie. Una mala alimentación, no dormir lo suficiente, o en general una falta de descanso acusada y prolongada en el tiempo, también predisponen a padecer estos síntomas. Por supuesto, el ADN se suma a esta lista, algunas personas desarrollan este tipo de patología simplemente por su herencia genética.
La blefaroplastia es la solución. Una cirugía que devuelve un aspecto sano y joven a quien se la realiza, y con resultados además muy duraderos en el tiempo. La mayoría de pacientes que recurren a ésta suelen superar la barrera de los 40.
Cómo es la operación de blefaroplastia
El cirujano estudia cada caso y opta por un tipo u otro de operación, según se vayan a tratar bolsas, ojeras, el párpado superior o el área inferior también.
Por regla general se utiliza anestesia local y sedación. La operación suele tener una duración de entre una y tres horas, debido a que en algunos casos solamente se operan los párpados inferiores o superiores y no todos a la vez.
El proceso de blefaroplastia comienza con una incisión en las líneas naturales de los párpados si se trata de los superiores o en la zona que se encuentra justo debajo de las pestañas si nos referimos a los inferiores. Tras este primer paso, se procede a la eliminación de la grasa acumulada. Cuando las bolsas son excesivas, se procede también a eliminar la piel sobrante. Finalmente, se cierran las incisiones con suturas muy precisas persiguiendo el resultado más natural.
Con la cirugía de blefaroplastia se consigue rejuvenecer la imagen del rostro, eliminando las bolsas y reduciendo las arrugas.Es decir, nos encontramos con dos tipos de blefaroplastia, tal y como nos indican y describen los doctores Carlos Guillón y Ramón Calderón de FEMM, Cirugía y Medicina Estética.
En la blefaroplastia superior se extirpa el exceso de piel y grasa del párpado superior mediante una incisión que se oculta en el pliegue del párpado. Si es necesario se remodela el músculo orbicular y se extirpan parcialmente las bolsas de grasa en caso que éstas sean grandes o protruyan. A través de la misma incisión por la que se realiza la blefaroplastia se pueden tratar los músculos responsables de las arrugas del entrecejo, eliminándolas.
La blefaroplastia inferior persigue alisar la piel del párpado inferior y eliminar las inestéticas bolsas de grasa bien extirpándolas parcialmente o bien recolocándolas en su lugar.
En definitiva, con la cirugía de blefaroplastia se consigue rejuvenecer la imagen del rostro, eliminando las bolsas y reduciendo las arrugas. En ocasiones también ayuda a mejorar la visión, ya que cuando el exceso de piel cuelga sobre las pestañas puede dificultar la visión periférica. El aspecto, más joven y despierto. Los resultados de la blefaroplastia se mantienen años; en muchos casos, estos son permanentes.
Antes y Después
Toda intervención quirúrgica, necesita diferentes consejos a la hora del post y el pre operatorio. Por ello, Clínica FEMM nos da a conocer diferentes recomendaciones que ayudarán al paciente a disfrutar de un resultado todavía mejor tras realizarse su blefaroplastia.
En primer lugar, antes de la intervención:
- No se debe tomar aspirina ni fármacos antinflamatorios al menos una semana previa a la operación, pero sí se puede ingerir paracetamol o nolotil.
- Se debe preparar la piel de los párpados y del rostro aplicando crema hidratante o contorno de ojos para poder mantenerla elástica.
- Hay que tener en cuenta que se debe ser prudente a la hora de utilizar maquillaje y por supuesto no utilizar rímel o máscara de pestañas tres días antes de la intervención ya que podría interferir en el láser o eléctrica que se aplicará en la zona.
- De forma opcional tomar, si es necesario, Arnica (producto de herbolario natural) los días del pre, ya que produce efecto neutralizante de los moratones.
Pero todavía se pueden corregir más alteraciones estéticas
En ocasiones, además de practicar una blefaroplastia estándar para mejorar la piel y las bolsas de los párpados, tenemos la posibilidad de eliminar las ojeras mediante lipofilling o relleno de las ojeras con la propia grasa del paciente además de utilizar la misma para atenuar los surcos peribucales (nasogenianos ) o líneas de expresión de la cara.
En estos casos de blefaroplastia asociada a lipofilling se recomienda:
- Hidratar la zona de la que vamos a extraer la grasa sobrante (habitualmente del abdomen o la cadera).
- El paciente tendrá que llevar una prenda compresiva durante dos semanas.
- En los casos de ojeras oscuras se opta por la técnica Nanofat (mejorar el tono de la piel mediante un degradado de la misma grasa del paciente que aporta vitalidad a los párpados inferiores y mejora el color oscuro).
Con toda esta información, la persona que se someta a esta intervención tendrá que tener en cuenta en el postoperatorio diferentes actuaciones:
- Aplicar frío en la zona durante los tres días siguientes, puede ser mediante antifaz o bien con los últimos sistemas de Hiloterapia.
- Se debe mantener reposo domiciliario durante dos días.
- Finalmente, es recomendable no hacer esfuerzos físicos al menos durante diez días, tras los cuales podría incorporarse a su vida habitual.
Riesgos
Los doctores Carlos Guillón y Ramón Calderón, también nos relatan algunos posibles efectos secundarios que se pueden producir tras una intervención de beflaroplastia
La operación suele tener una duración de entre una y tres horas, debido a que en algunos casos solamente se operan los párpados inferiores o superiores y no todos a la vez.Toda cirugía implica ciertos inconvenientes y riesgos que hay que conocer y aceptar. Una operación de blefaroplastia no suele conllevar complicaciones, si bien podemos citar:
- Infección.
- Visión doble o borrosa durante unos días.
- Edema temporal de los párpados.
- Asimetrías leves en la cicatrización.
- Dificultad para cerrar completamente los párpados durante el sueño.
- Párpado inferior plegado o torcido, que puede precisar una cirugía de revisión.
Tanto Guillón como Calderón realizan las operaciones de blefaroplastia en FEMM Cirugía y Medicina Estética, centro que dirigen, ambos miembros de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE). El objetivo de estos cualificados profesionales es atender cada necesidad estética de forma personalizada y dar confianza y seguridad a sus pacientes, utilizando desde las técnicas menos invasivas a las operaciones de cirugía estética más sofisticadas. Operaciones que "mejoran la silueta y los contornos de nuestro cuerpo, haciéndonos experimentar realmente una mejoría física y sintiéndonos mucho mejor; haciendo que seamos más felices", declaran.